Cirugía Micrográfica de Mohs
¿Qué es la cirugía micrográfica de Mohs?
Aunque la ciencia médica genera continuamente tratamientos innovadores para el cáncer de piel, la cirugía micrográfica de Mohs desarrollada en la década de 1930 por un médico de Wisconsin, Frederic Mohs, sigue siendo uno de los métodos más eficaces y exitosos de todos los tiempos para la erradicación del carcinoma de células basales y el carcinoma de células escamosas. Generalmente, el melanoma no se trata con la cirugía de Mohs, aunque mejoras recientes en la técnica también están haciendo esto posible de forma gradual.
¿Quién es un buen candidato para el procedimiento?
Mientras que la gran mayoría de los pacientes con cáncer de piel son buenos candidatos para una cirugía micrográfica de Mohs, la técnica es especialmente útil en situaciones donde la preservación de tejido sano de la piel es fundamental para la apariencia o función del área afectada. Algunos ejemplos de áreas críticas tratadas mejor con la cirugía de Mohs incluyen la nariz, orejas, párpados, rostro, manos, pies y genitales.
La microcirugía de Mohs también se sugiere para el tratamiento de…
- cánceres de piel donde hay tejido cicatricial
- los cánceres de piel que no se presentan con un crecimiento claro y definido
- cánceres de piel que muestran patrones de crecimiento únicos
- cánceres de piel que son masivos
- cánceres de piel que han reaparecido
¿Cuáles son los beneficios de la microcirugía de Mohs?
- Índice de curación del 96 % en promedio
- Cicatrices mínimas
- Tejido de la piel saludable preservado en su totalidad
- Más precisa que la cirugía de escisión
- Ideal para el tratamiento de cánceres de piel complejos
- No requiere anestesia general
- Prácticamente indolora
¿Cómo funciona?
En la cirugía de Mohs de Charlotte NC los pacientes reciben anestesia local, que insensibiliza el área de tratamiento. Esto ayuda para una recuperación más rápida con menos incomodidad normalmente asociada con la anestesia general. La cirugía normalmente dura entre 2 y 4 horas, dependiendo de la medida de los tumores.
Durante este riguroso procedimiento, se retiran las capas finas de la piel una por una y se inspeccionan con un microscopio para determinar la presencia de carcinomas. Se marcan las células cancerosas, se codifican por color y se extirpan, y se diferencia el tejido sano circundante. Este proceso continúa hasta que se encuentra una capa libre de cáncer, momento en el cual se da por finalizada la cirugía. Las heridas se suturan, se reconstruyen o sanan naturalmente.
La cirugía de Mohs tiende a ser un esfuerzo de grupo, ya que se emplean los talentos no sólo de los cirujanos de Mohs, sino también de los dermatólogos, cirujanos plásticos, cirujanos dentales, otorrinolaringólogos y oftalmólogos. De esta manera, el estado del paciente se aborda desde todos los ángulos, lo que garantiza una atención más integral y su recuperación es posible.
Para más información sobre el proceso, disfrute del siguiente vídeo informativo:
Recuperación
Aunque la mayor parte de los pacientes de nuestra reconstrucción de Mohs en Charlotte NC experimentan un poco dolor durante o después del procedimiento, el dolor de cabeza ocasional es de esperarse y puede tratarse fácilmente con una bolsa de hielo o Tylenol. El enrojecimiento en el sitio de tratamiento también es muy normal. Si su cirugía fue de cerca de los ojos, puede experimentar hinchazón o hematomas, que a su vez se tratan mejor mediante el uso de una compresa fría o hielo.
Dar seguimiento con la cirugía de Mohs es importante. Su médico programará citas regulares para garantizar que la recuperación se está llevando a cabo sin ningún problema. Debido a que el cáncer de piel tiene una alta tasa de recurrencia, en general, se aconseja que usted continúe recibiendo la detección integral de su dermatólogo al menos una vez al año.